viernes, 17 de julio de 2009

ground control to Major Tom

Dijo, ah, no dejes de respirar que los tiempos está-an cambiando, y ladeó la cabeza como si no se lo creyera, ya sabes, esas cosas que se permitía decir sólo porque se parecía un poco a Dylan. Como el tiempo mordía y el verano también, las horas caían entre luces y cristales, y la ciudad estaba tan quieta que daba miedo. Hay un resto de tu sombra en mi cajón, pensaste, y el hombre campa a sus anchas por la luna, ven conmigo, veremos a Kubrick, puede que le pongamos un nombre a cada cráter. Como si creyeras que no iba a decir que no, que eso era todo, pero pobre, en realidad eso es lo de menos y hay un par de cosas que deberías saber: vestir de negro no nos va a salvar, no, ni fumar a escondidas, ni beber cerveza con sal. En el mar también hay luna, más oscura, siempre turbia, y prefiero -no, no es que prefiera, es que no puedo evitar- hundirme en ella. Y lo más importante: las grandes estrellas del rock han muerto y algún día lo harás tú -sí, lo siento- y sin vida, my darling, no me sirves; sólo me sirve la música.



Dicen que ayer, 16 de julio, pero en 1969, despegó el Apolo 11.

4 comentarios:

A. dijo...

fantàstic, em faig moltes imatges mentre llegeixo... your circuits dead, theres something wrong

àngels

Anónimo dijo...

m'agrada molt com escrius, i és cert, crees moltes imgatges i molt bones. realment, molt bo.

ana

Lómiel dijo...

Moltíssimes gràcies a les dues... de debò :)

I m'encanta veure't per aquí, Ana! gràcies!

Eva dijo...

M'agrada molt el verb ladear i si les coses no es comencen a moure potser explotaré. I like it. ;)